Goalball en Argentina
Como habíamos adelantado en la presentación anterior, en
esta presentación haremos hincapié en la práctica del goalball en nuestro país.
Su llegada a la Argentina se da a principio de los años
2000, en primera instancia de forma recreativa. En el 2005 se presentó un
proyecto para practicarlo en el Cenard; el CeNARD es el lugar donde los deportistas de alto rendimiento
realizan sus entrenamientos y donde entrenan la mayoría de los seleccionados
nacionales argentinos. Pertenece a la Secretaría de Deportes de la Nación, cuya
sede está situada dentro del mismo.
Esta
iniciativa fue el punto de partida para la conformación de la selección
nacional.
El
goalball tomó fuerza desplazando al torball, ya que este último no contaba con
apoyo económico del Estado debido a que no era un deporte paralímpico. Quienes
practicaban el torball se reconvirtieron y comenzaron a jugar al goalball. Los
dos deportes son similares en cuanto a la dinámica del juego. La diferencia
radica en el tamaño del campo de juego, menor en el torball, al igual que la
pelota, también más pequeña.
El punto de inflexión para el crecimiento del Goalball se logró en
el 2016 con su inclusión en los Juegos
Evita que organiza la Secretaría de Deportes de la Nación.
Se trata de una competencia en la que participan chicos y chicas de entre 13 y
18 años de todo el país, y la cual funciona como una usina importante para
la captación de
jóvenes promesas.
Como describimos en el artículo anterior, el goalball es
practicado por hombres y mujeres y nuestro país cuenta con ambas selecciones.
Los dos planteles cuentan con jugadores y jugadoras de distintas partes del
país y coinciden en la superación permanente para lograr más y mayores
objetivos.
Es por eso que fomentamos enfáticamente el acercamiento de todos y
todas al deporte sea cual sea, para poder aplicar en todos los ámbitos de la
vida cotidiana el aprendizaje adquirido y las experiencias compartidas.
Fuentes:
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