Leer constantemente. Un hábito enriquecedor y constructivo.

En el presente artículo de la sección entretenimiento y recreación, destacaremos la importancia de fortalecer permanentemente el hábito de leer, y aprovechar al máximo esta  

Gran fuente del   conocimiento. 

En una de las entradas anteriores hablamos sobre la literatura en sus diferentes matices, y en esta oportunidad nos preguntaremos qué leemos, por qué y para qué lo hacemos, y cuáles son las herramientas con las que contamos, realizando un breve recorrido que nos haga comprender que debemos valorar el momento que atravesamos en una era de avances significativos, principalmente de la tecnología.

Los seres humanos generalmente tomamos contacto con la lectura desde muy pequeños, en principio de manera indirecta ya que en muchas ocasiones hemos podido conciliar el sueño luego de escuchar algún que otro cuento leído por nuestros mayores. Luego nos introducimos de a poco en la práctica de la escritura y en el aprendizaje del abecedario hasta llegar a la satisfacción de leer algo escrito por nosotros mismos por más mínimo que sea. Más tarde o más temprano, inducido por nuestra familia o por nuestros primeros docentes, el mundo de la lectoescritura irrumpe por completo en nuestras vidas.

No siempre leemos lo que nos atrae, es más, muchas veces nos cuesta saber qué es lo que nos gusta. Durante todos los niveles educativos por los que atravesamos, siempre hay géneros, autores y temáticas que nos atrapan más que otras, pero es importante pensar que incluso aquello que nos atrae menos también tiene cuestiones interesantes para destacar.

En un principio surgió la modalidad de memorización de textos solamente religiosos, sin poner énfasis en la comprensión de lo que se leía y escuchaba. Se pretendía la difusión solamente de dichos textos. Luego la alfabetización progresiva de toda la población trajo consigo la construcción de un pensamiento moderno y crítico, concibiendo a la lectura y a la escritura como prácticas sociales y culturales. Actualmente la mayoría de las sociedades son instruidas y los hombres, las mujeres, los niños y las niñas experimentan un continuo estímulo oral y escrito.

Es trascendental referirnos al uso de las nuevas tecnologías. Sin dudas ha impactado fuertemente en todo el mundo, siendo un avance más que importante y una opción sumamente útil para las personas con discapacidad, que muchas veces dependíamos de terceros para poder acceder a la bibliografía que necesitábamos o que nos interesaba. También en muchos casos se plantea como algo negativo porque el papel se vio desplazado, hecho que siempre tratamos de que no suceda al igual que lo que a menudo recalcamos acerca de nuestro sistema braille. Siempre la escritura en papel debemos reivindicarla.

Es por eso que analizando lo expuesto y teniendo en cuenta el grado de relevancia que ha adquirido la palabra oral y escrita, consideramos sumamente importante poder leer constantemente y también animarnos a escribir. Podemos leer con el objetivo de informarnos acerca de nuestra actualidad, podemos leer fantasía, poesía, ficción. Podemos leer para despejarnos, para entretenernos, para instruirnos y para crear.

La lectura nos proporciona recursos lingüísticos para opinar y argumentar, para expresar lo que siente el corazón, para sostener un debate, para reflexionar sobre diversas situaciones de la vida cotidiana y para tener conversaciones sin final.

En general, todas las sociedades necesitan de ciudadanos que tengan gusto por la lectura, que estén informados y se sientan libres de expresar y de crear nuevas oportunidades de crecimiento y emprendimiento social e individual.

Por todo lo expuesto es nuestro objetivo que luego de leer este artículo, sientas interés y deseos de leer un libro ya sea en papel, en audiolibro o en formato de texto digital, sea del género que sea. Intentamos con estas líneas, que el hábito de leer sea incorporado por todos y todas, para construir una sociedad que se involucre, que forme opinión, que se exprese, que se anime a sentir, a creer, que no se rinda ni renuncie fácilmente.

La lectura es esencial para el cerebro y para el aprendizaje, de ahí que, durante años, escritores, filósofos y autores de todas las épocas hayan lanzado sus particulares  obras en pos de la lectura.

"Que otros se enorgullezcan por lo que han escrito, yo me enorgullezco por lo que he leído". Jorge Luís Borges, escritor.