Básquet en silla de ruedas. Uno de los deportes más populares del programa paralímpico.
El básquet en
silla de ruedas es uno de los deportes más populares del programa paralímpico.
Comenzó a implantarse para rehabilitar a los soldados estadounidenses heridos
durante la II Guerra Mundial, pero su popularidad se extendió rápidamente por
todo el mundo. En la actualidad, se practica en más de 80 países.
Las reglas
del básquet en silla de ruedas son prácticamente las mismas que las de la
modalidad convencional: la cancha tiene las mismas medidas, los aros están a
igual altura y el sistema de puntuación es idéntico: dos tantos para las canastas
logradas durante el juego (Doble), uno por cada tiro libre anotado y tres para los
balones encestados desde más de 6,75 metros de distancia (Triple). La única diferencia
consiste en que los jugadores deben picar o pasar la pelota después de empujar
la silla dos veces.
Para poder
jugar al básquet en silla de ruedas el jugador debe tener una discapacidad
física permanente en sus extremidades inferiores, que le impida correr y saltar.
Una vez que
el jugador ha cumplido este requisito, son clasificados para jugar bajo el
Sistema de Clasificación de Jugadores de la Federación Internacional de básquet
en Silla de Ruedas (IWBF).
Mediante la
clasificación, a los jugadores se les asigna una puntuación de entre 1.0 y 4.5,
de acuerdo a su nivel de función física. Estos puntos se suman a los del
equipo, no estando permitido exceder los 14 puntos entre los 5 jugadores que
están en la cancha al mismo tiempo. Esto asegura que cualquier jugador, al
margen de su grado de discapacidad, tenga un papel integral para jugar dentro
de la estructura del equipo.
Jugadores
punto 1: No tienen movimiento en las extremidades inferiores, y poco o ningún
movimiento controlado de tronco. Su equilibrio tanto hacia delante como hacia
los lados es significativamente deficiente, y dependen de sus brazos para
volver a la posición erguida cuando se desequilibran.
Estos
jugadores no tienen estabilidad en una situación de contacto y normalmente
toman rebotes por encima de la cabeza con una sola mano.
Jugadores
punto 2: Normalmente no tienen movimiento de las extremidades inferiores, pero
tienen algún movimiento de tronco parcialmente controlado hacia delante. No
tienen movimiento controlado de tronco hacia los lados ni de rotación. Los
jugadores tienen una estabilidad limitada en situación de contacto, a menudo
dependiendo de la inmovilización de su mano para permanecer erguidos en un
choque.
Jugadores punto
3: Pueden tener algo de movimiento en las extremidades inferiores, y tienen
movimientos controlados de tronco hacia delante, hacia el suelo y de vuelta a
la posición erguida, y tienen algún control de rotación. Son más estables en
una situación de contacto y capaces de tomar un rebote por encima de la cabeza
con las dos manos con comodidad.
Jugadores
punto 4: Tienen un movimiento normal de tronco, pero debido a una función
reducida en las extremidades inferiores no pueden inclinarse hacia ambos lados
con un control total. Son estables en contacto y en rebotes, con movimientos hacia
delante y de rotación.
Jugadores
punto 4.5: Son los jugadores con menor discapacidad en la cancha. Normalmente sólo
tienen una mínima dificultad en los miembros inferiores o una amputación única
por debajo de la rodilla. Cuentan con movimientos de tronco en todas
direcciones y son muy estables en contacto y en rebotes.
Teniendo en
cuenta lo expuesto, es importante destacar la expansión globalque ha adquirido
este deporte y las múltiples categorías en las que se agrupan aquellos que
deciden enfrentar el enorme desafío de la competencia a pesar de las
adversidades, es por ello que en esta oportunidad reconocemos y alentamos la
superación.
Para la
próxima entrada contaremos con un testimonio muy valioso, digno de tomar como
ejemplo.
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